Tarro Verde es la conservera ecológica de la serranía de Cuenca. Sus conservas están elaboradas con ingredientes 100% de origen vegetal, libres de gluten y alérgenos. Los vegetales con las que están hechas proceden de su huerta y cuentan con el certificado ecológico.
Los productos de Tarro Verde los podemos encontrar en la tienda online de su web, así como en diferentes tiendas locales de alimentación ecológica de la zona. Estos consisten en platos preparados de legumbres estofadas con verduras (lentejas con verduras, garbanzos con espinacas y garbanzos con setas), tarrinas de patés vegetales (de calabaza, setas o berenjenas) y legumbres cocidas, que se envasan y etiquetan de manera manual.
Este proyecto de conservas veganas y ecológicas consiguió el primer premio en el concurso de iniciativa empresarial Lanzadera de la Diputación Provincial de Cuenca.
Problema: crear conservas lo más naturales posibles
La máxima dificultad para los fundadores de la marca Tarro Verde residía en la prevalencia de sus principios. Estos no debían perderse por profesionalizarse y debían persistir durante todo el proceso.
Ser respetuosos con el medio ambiente, evitando el uso de pesticidas y fomentando la economía circular y de kilómetro cero era su razón de ser. Apostaron, desde sus inicios, por el veganismo como una manera de fomentar la riqueza de su tierra y ofrecer otras maneras de alimentarse.
Entendían que comercializar sus conservas no debía estar reñido con el cocinar a fuego lento, de manera sana y artesanal.
Reto: conservar manteniendo las máximas propiedades
Su desafío primero residía en su misma esencia, ya que buscaban poder hacer de sus conservas un negocio sin perder de vista aquello que los llevó a emprender. Ello suponía buscar un sistema de conservación que sobre todo mantuviese las propiedades saludables de los alimentos y sus características organolépticas. Permitiendo una vida útil de larga duración de las preparaciones y un sistema de conservación comprometido con el cuidado del medio ambiente.
Solución: una autoclave que permite la cocción en el propio envase
Para ello, desde Tarro Verde estudiaron las diferentes opciones de recipientes existentes en el mercado y también de esterilizadores de conservas. Finalmente se decantaron por las conservas de vidrio y por la autoclave de TERRA Food-Tech®.
“La autoclave es la pieza fundamental de nuestro proceso, parte de nuestras elaboraciones se cocinan en los propios botes de conserva y todas pasan por el proceso térmico para su esterilización.”
Augusto Gil, propietario de Tarro Verde
Desde TERRA Food-Tech® les facilitaron la información técnica pertinente y les ofrecieron la posibilidad de visitar sus instalaciones en Barcelona. Allí mismo pudieron ver las máquinas que mejor se adaptaban a sus necesidades y aprender su uso. Y el servicio de asesoría de la compañía les ayudó a ir resolviendo, vía telefónica y telemática, todas las dudas iniciales que les surgían al empezar a hacer funcionar la autoclave.
Gracias a todo ello, ahora desde el humilde obrador de Tarro Verde en Ribatajada han podido hacer llegar su producto ecológico, vegano y sin alérgenos, a toda España y también están en contacto con empresas de otros países para exportar.
“Si se busca una máquina compacta y fiable que se adecúe a tu nivel de producción, sin duda recomendaríamos las autoclaves de TERRA Food-Tech®. En nuestro caso, hemos acertado.”
Augusto Gil, propietario de Tarro Verde